Consejos utiles

Visitar la isla de Espalmador: el paraíso natural al norte de Formentera

Si Formentera es considerada la «perla del Mediterráneo«, el diminuto islote de Espalmador no puede que encarnar el paraíso terrenal.
Esta pequeña isla se encuentra al norte de Formentera, justo donde termina la mundialmente conocida playa de Illetas. Entre ambos hay un estrecho canal de agua turquesa, conocido como S’es Trucadors. El denominador común son las playas casi caribeñas, de arena blanca y mar azul brillante. ¡Una visita obligada durante unas vacaciones en la isla!

Espalmador Formentera, cómo llegar

Se trata de una isla protegida, que forma parte del Parque Natural de las Salinas de Ibiza y Formentera. Su naturaleza es realmente virgen, a excepción de tres pequeños edificios: un faro, una pequeña capilla y una torre de defensa que data del siglo XVIII.

Obviamente, sólo se puede llegar por mar, pero no hay barcos públicos que conecten el puerto de la Savina con la isla. Hasta hace poco, este servicio lo ofrecía el barco Bahía, que salía del puerto a horas fijas, se detenía en Illetas y seguía hasta Espalmador. Pero desde 2020 este servicio ha sido cancelado por el gobierno local, con el objetivo de preservar la naturaleza del desembarco de las «masas» turísticas.

Por lo tanto, desde entonces es necesario un barco privado para llegar a Espalmador. Es posible alquilar una zodiac o una pequeña embarcación. De hecho, hay zonas de la isla donde es posible desembarcar con este tipo de barcos. Otra alternativa podría ser reservar unaexcursión catamarán Formentera, quizás con la posibilidad de comer a bordo para pasar un día único e inolvidable.

A veces en internet se indica que desde la punta de S’Estrucadors, la lengua de arena que forma la parte más septentrional de Formentera, también es posible realizar la travesía a pie. Sin embargo, cruzar a pie o a nado está prohíbido, ya que en esta zona suele haber corrientes fuertes y peligrosas.

Playa de Espalmador y qué ver en la isla

El lugar más popular de la isla es la Playa de S’alga, en la parte sur de la costa oeste, que es la continuación natural de Ses Illetes. Arena blanca y mar turquesa, naturaleza virgen y sin contaminar, ¡es difícil pedirle más a una playa mediterránea!
Hay otras dos playas en la isla: Cala de Sa Torreta, también en el lado occidental y algo más resguardada, y Cala Bosch, situada en el lado nororiental.

Hay varias rutas de senderismo por toda la isla, para que puedas recorrerla a lo largo y ancho. Los paisajes son muy encantadores y evocadores, especialmente en la zona del faro y la torre de Sa Guardiola. Aprovechamos para recordar que se trata de un parque natural y que, por lo tanto, no está permitido salirse de los caminos establecidos y señalizados.

Alquilar una zodiac o reservar una excursión en catamarán Formentera

La mejor opción para pasar un día exclusivo e inolvidable es alquilar una lancha neumática y navegar entre Illetas y Espalmador. Con este tipo de embarcación pequeña se puede llegar directamente a la hermosa Playa de S’Alga, que como hemos dicho es la más bonita de todas. Para reservar una zodiac, incluso sin partón, puedes enviar tu solicitud directamente desde nuestro sitio web: https://www.formenteravuela.com/es/alquiler-barco-formentera

Una alternativa, para quienes no deseen alquilar un barco, es reservar una excursión en catamarán. Se trata de una excursión de día completo con almuerzo a bordo a base de carne y pescado a la parrilla, con una parada de unas 2 horas en la misma playa de Cala de S’Alga en Espalmador. Por supuesto, se harán más paradas durante el viaje y podrá admirar la hermosa costa de Formentera.

DCIM\100MEDIA\DJI_0064.JPG

Curiosidades y leyendas: los baños de barro, el dueño y la visita del emperador

Entre las diversas historias que se cuentan sobre la isla de Espalmador, a menudo se oye hablar de la posibilidad de tomar baños de barro que son buenos para la piel. Desgraciadamente, esto es sólo una leyenda, ya que las tan cacareadas funciones estéticas nunca han sido reconocidas. Además, debido a que esta costumbre se había convertido en una moda, el gobierno insular decidió prohibir esta práctica y se prevén multas de hasta 1.000 euros. El estanque fangoso es, de hecho, un lugar en el que siempre ha vivido la avifauna local, que se reproduce en determinadas épocas del año.

La otra curiosidad es que este islote es de propiedad privada. El propietario original fue un formenterense llamado Carlos Tur, que en 1932 la vendió a una familia inglesa por 42.500 pesetas, unos 330 euros. Para la época era una suma interesante, pero nada comparado con la venta posterior en 2018, cuando una familia luxemburguesa la volvió a comprar por 18 millones de euros. El gobierno local había intentado comprarla, pero no había fondos suficientes para ello. Afortunadamente, las leyes locales siguen prohibiendo la construcción de cualquier tipo de edificio, para preservar la naturaleza virgen.

La historia más divertida se remonta a la época del emperador romano Adriano, alrededor del año 120. Cuenta la leyenda que llegó a la isla por consejo de un oráculo, con el objetivo de “bañarse de barro milagrosos acompañado de un joven rubio”. El problema que tenía el emperador estaba relacionado con la disfunción eréctil, que plagaba su relación con Vibia Saba, su esposa.
Por ello, le acompañaba en este viaje un encantador adolescente llamado Antinoo. Sin embargo, el resultado de esta visita a Espalmador no fue exactamente el esperado. De hecho, durante sus baños terapéuticos, el emperador Adriano se dio cuenta de que se sentía atraído por Antinoo y que era homosexual. La pasión estalló y el emperador se enamoró del joven y lo llevó a vivir con él.

Hoteles y Casas Vacacionales

Alquiler y Servicios